Nacida en Huesca en 1969. Licenciada en Historia por la Universidad de Zaragoza (1995). Diploma en Relaciones de Género y Desarrollo por la Universidad Complutense de Madrid (2001). Formación como Promotora de Género (2015). Máster de Igualdad en el Ámbito Público y Privado por la Universidad Jaume I de Castellón (2020). Formación Docente y Tutora de Teleformación.

Facilitadora de círculos de mujeres desde 2005. Integrante del equipo investigador liderado por Eugenio Monesma (2012) sobre las cuevas y piedras de la fertilidad de Huesca. Creadora de La Ruta de la Fertilidad: retiros y peregrinaciones para mujeres en lugares ancestrales (2014).

Soy una mujer comprometida con la tarea de construir una sociedad mejor, cultivando los valores de la empatía y la tenacidad.

Desde niña tuve el deseo de conocer y aprender y tras terminar la Universidad, dirigí mis esfuerzos laborales y personales a viajar para conocer otras culturas y otros territorios.

Pasé varias temporadas en el Sur de México colaborando con centros de derechos humanos y viviendo en comunidades indígenas, lo cual me aportó un cambio de perspectiva sobre la vida y sobre el valor de las personas.

Con esta experiencia pasé a trabajar como cooperante en Honduras para una ONG y luego, ya viviendo en Zaragoza, como gestora de recursos en una asociación de personas afectadas por el VIH. En todas ellas, aprendí que lo mejor y lo más importante que tenemos en la vida, son las personas, la familia, amistades, colegas, vecinas y vecinos…

A esta trayectoria profesional se fueron sumando diferentes formaciones relacionadas con la perspectiva de género y la igualdad y otros empleos como Monitora de Actividades, Encuestadora, Camarera, Secretaria, Cuidadora. …entre otros. En el desempeño de cada uno de ellos he aprendido algo valioso y útil para la vida y para mi profesión actual y en conjunto me aportan una visión global de la sociedad.

En 2015, tras una crisis laboral y personal, revisé todos mis conocimientos y experiencias vitales previas y me hice consciente de todo el bagaje acumulado sobre el tema de la igualdad entre hombres y mujeres. Así decidí iniciar una nueva etapa en mi vida. En el mismo año obtuve el certificado como Promotora de Género y comencé a desarrollarme profesionalmente en esta actividad en centros educativos, asociaciones, ayuntamientos e instituciones como el IAM, Proyecto Concilia…etc.. Supe detectar la necesidad de desarrollar, en el ámbito de la formación en igualdad, el tema de la historia de las mujeres con una perspectiva colectiva, puesto que apenas tenía presencia. Comencé ofreciendo conferencias y fui ampliando contenidos hasta crear el curso El Legado de las Mujeres, de 20 horas. He tenido la oportunidad de impartirlo en 7 ocasiones, 3 de ellas de forma OnLine, y me siento tremendamente satisfecha de lo útil que nos resulta, a las mujeres, conocer nuestra Historia, partiendo de la hominización y llegando hasta la lucha por los derechos femeninos.

Mi experiencia profesional está muy relacionada con la formación, actividad en la que me siento muy satisfecha porque compruebo su eficacia y en la que recibo muy buenas valoraciones. En el mundo empresarial trabajo para transformar positivamente las relaciones en este ámbito y generar prácticas beneficiosas como la revisión de los discursos corporativos, el análisis con perspectiva de género de las empresas, la formación y sensibilización en igualdad….y más servicios muy útiles para asumir la responsabilidad social y generar beneficios.

La mujer que soy aquí y ahora, se parece poco a la que soñaba cuando era niña pero sí que coinciden en algo fundamental, creer en lo que hago, tener fe en que mi trabajo contribuye a mejorar el mundo. Ser mujer implica pagar precios por perseguir metas propias y para conseguirlo, cuando lo he conseguido, he tenido que pelear sin descanso. Pero aquí estoy, creando mi personal forma de contribuir a la sociedad, desde la empatía y la tenacidad, valores que aprecio en su justa medida tras más de cincuenta años de vida. Es por eso que he llegado a la conclusión de que, vivir es ir ganando y perdiendo luchas y que, ser feliz, es perseverar sin descanso.

A mí me funciona.